miércoles, 1 de noviembre de 2017

MBT: M1A2SEPV3, muy diferente al Abrams original

Olvídate del nombre, el M1A2SEPV3 es un carro de combate totalmente nuevo


El Ejército de Tierra estadounidense le pone un nombre antiguo a un vehículo nuevo




David Axe | WIB LAND

El Ejército de Tierra estadounidense acaba de hacerse con un carro de combate nuevo. Pero no podrías saberlo por la forma en la que la componente de combate terrestre llama al vehículo.

El 4 de octubre de 2017 el departamento de programas para vehículos terrestres del Ejército de Tierra estadounidense declaró que el Ejército había recibido el primer M-1A2SEPV3 «según calendario y presupuesto». General Dynamics Land Systems fabrica el carro de combate en Lima, Ohio, a partir de barcazas de carros M-1 ya existentes.

El Ejército de Tierra estadounidense solicitó la compra de 56 carros de combate M-1A2SEPV3 para 2018, como parte de un total de unas mil unidades del nuevo carro ─suficientes para dotar a todas las brigadas acorazadas en servicio activo de la componente terrestre─. En la actualidad, un V3 cuesta alrededor de 20 millones de dólares. El precio debería reducirse a medida que aumente el ritmo de fabricación.

Aunque oficialmente se trata de una variante del carro de combate de casi cuatro décadas de antigüedad M-1, el SEPV3 es, en todos los sentidos, fundamentalmente nuevo. La variante anterior, el M-1A2SEPV2, entró en servicio en 2007.

«Las principales mejoras radican en letalidad, supervivencia y sostenibilidad», declaró Don Kotchman, vicepresidente de General Dynamics, a finales de 2015.

El M-1A2SEPV3 cuenta con navegación inercial mejorada para lograr lo que Kotchman describió como «mejor dispersión del tiro» ─en otras palabras, mayor precisión del cañón principal─. Dispone además de un enlace de datos para municiones programables, lo cual hace que el SEPV3 sea compatible con los nuevos proyectiles de cañón «inteligentes» que empiezan a incorporarse al arsenal del Ejército de Tierra estadounidense.

El carro de combate V3 también cuenta con un blindaje delantero y trasero más resistente que el del V2 ─además incorpora un inhibidor de frecuencias para hacer frente a artefactos explosivos improvisados activados por radio─.


Foto del Ejército estadounidense

Algunas de las mejoras más importantes son aparentemente las más aburridas. El V3 lleva instalada bajo el blindaje una nueva unidad de alimentación auxiliar (APU). Esta APU permite que la tripulación del carro alimente toda la electrónica del vehículo sin encender el motor principal. De esta manera, un carro de combate puede vigilar el campo de batalla de una forma silenciosa y eficiente durante horas sin beberse todo un depósito de combustible.

Kotchman declaró que la unidad de alimentación auxiliar convierte al nuevo carro de combate en un tercio más eficiente en consumo de combustible respecto a las variantes anteriores.

El V3 monta un generador de 1.000 amperios que Kotchman declaró que podría alimentar los nuevos equipos radio digitales que el Pentágono está desarrollando. Para dar soporte a los enlaces de datos digitales de los equipos radio, el V3 incorpora una arquitectura Ethernet y mejores unidades que se pueden reemplazar sobre la marcha ─en esencia, cajas negras para placas base de ordenadores─.

El V3 no lleva un motor nuevo. El Ejército de Tierra estadounidense decidió no cambiar la turbina de gas del M-1 por un motor diésel más eficiente. «Ahora mismo, al poner las prioridades en la balanza, no parece que al Ejército le interese este aspecto», declaró Kotchman.

Del mismo modo, el V3 utiliza la misma suspensión para 70 toneladas que el V2. Kotchman declaró que el SEPV3 todavía se queda por debajo de las 70 toneladas, pero que podría aumentar de peso con futuras actualizaciones. «Estamos estudiando las posibilidades de futuras actualizaciones de la suspensión», declaró.

A pesar de compartir el motor, la suspensión, el armamento principal y el diseño básico del anterior M-1A2SEPV2, el V3 es un carro de combate mucho mejor defendido y más difícil de alcanzar con un nuevo sistema de alimentación y arquitectura de red.

Hace cincuenta años, el Ejército de Tierra estadounidense bien le podría haber dado un nuevo nombre a un vehículo con tantas características nuevas ─como poco, llamarlo M-1A3─. Pero en las últimas décadas, las Fuerzas Armadas estadounidenses han preferido restarle importancia a muchos de sus avances tecnológicos.

A veces, el juego de nombres representa un esfuerzo para evitar el escrutinio del Congreso y los contribuyentes. A principios de los años 1990, la Armada estadounidense se estaba recuperando de sus esfuerzos fallidos por desarrollar un nuevo cazabombardero furtivo llamado A-12.

Así que cuando la componente marítima le pidió a Boeing que le facilitara un nuevo caza para sustituir los modelos A a D del F/A-18, insistió en llamar al nuevo reactor el F/A-18E/F. No importa que este último tenga un fuselaje y unas alas más grandes y aerodinámicamente diferentes, nuevos motores, un nuevo radar y una cabina considerablemente mejorada respecto al F/A-18 original.

De la misma manera, mientras el Ejército de Tierra estadounidense continúe fabricando carros de combate nuevos bajo la denominación M-1, puede argumentar ante el Congreso y los contribuyentes que todavía utiliza carros de hace 40 años ─y necesita más dinero para hacerse con algo nuevo─.

De hecho, el M-1A2SEPV3 es nuevo. Aún si se parece a un carro de hace 40 años… y comparte el mismo nombre.

1 comentario:

  1. Buenas tardes. El primer lote de 56 carros es con barcazas existentes? Los otros 1000 son carros de nueva construcción, lo ùnico que mantiene igual es el nombre y el aspecto, ya que el blindaje será de ùltima generación. En resumen un carro nuevo.

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